Se encuentra situado en el antiguo Salón del Prado, llamado así haciendo por hacer referencia su situación, en el prado de los Jerónimos.

El origen del Museo del Prado habita en el Museo de Ciencias Naturales que junto al jardín botánico nunca fue, ya que Fernando VII y María Isabel de Braganza decidieron dedicar el edificio a albergar colecciones de arte y escultura.

Cuenta con mayor superficie expositiva del país y es uno de los más visitados. Es heredero de gran parte de las colecciones reales de los siglos XVI al XIX, por ello cuenta con valiosa representación de pintura europea de ese periodo de tiempo.

Autores como Velázquez, el Greco, Goya, Tiziano, Rubens, el Bosco, Murillo, Ribera, Zurbarán, Rafael, Veronese, Tintoretto, Van Dyck o Poussin, suponendo uno de los mayores atractivos del museo.