Habiendo apenas comenzado 2014, ya se puede intuir quiénes son los artistas que seguirán en la cresta de la ola y quienes comenzarán a despuntar. Por ello he querido hacer una recopilación de los diez artistas clave de este año. No he querido poner numeración porque muchos no son comparables entre sí y entre los más destacados es más difícil aún poner a uno por delante del otro. También reconocer que la lista tiene su propia lógica e interrelaciones, pronto os daréis cuenta del porqué.

Para empezar me gustaría hablar sobre Paupac Azul, un colectivo de artistas transmedia a los que les auguro un largo y exitoso recorrido. Sus obras son pura lírica multicanal, narradores que usan el vídeo y a veces la performance para contar historias que construyen nuestra propia intrahistoria. Indispensables e imprescindibles para este año y los venideros ya que cada una de sus obras son prácticamente una hoja de ruta fundamental para no perderse en esta realidad que nos ha tocado vivir. Obras como “Un salto de fe” muestran atisbos de los que probablemente veremos en la obra venidera, ya que éste colectivo se encuentra en plena transformación.

“Brotación en un día gris” de Ruth Montiel Arias.

Continuamos con la construcción de un relato emocional, pasando de la narración a lo más espiritual en las siguientes tres artistas que ahora mencionaré. La primera de ellas, Ruth Montiel Arias, una de las artistas gallegas más interesantes del momento. Toda su obra está impregnada de una espiritualidad única vinculada con lo ancestral a través de la trascendencia de lo terrenal y al mismo tiempo vinculada a la propia identidad de la artista. A través de la fotografía e instalación su obra se presenta como una búsqueda artística constante de la eternidad en lo aparentemente cotidiano.

Imagen del proyecto “Geometría de ecos” de Carla de Andrade.

Seguimos hablando de trascendencia, en este caso aplicada al paisaje. Es muy complicado hacer que el paisaje, a través de la fotografía, sea percibido como un ente con vida propia. Eso es lo que consigue Carla Andrade. El paisaje como parte de la propia identidad de quien lo percibe, como algo que cambia, que es eterno y se transforma en los ojos del espectador.

“Seele III” de Irene Cruz.

Otra artista capaz de crear una atmósfera única es Irene Cruz. La primera vez que vi su obra fue en el marco del proyecto fotográfico 10×10. El peso de la gama de luces frías contrastado por algunos toques cálidos en la luz del sol o la piel humana es su firma. No conviene perder la pista a esta artista.

Ilustración 5. “Piedad” de Fernando Bayona.

En el otro lado me gustaría destacar otra serie de artistas que se mueven entre lo ufano y lo terrenal, desde diferentes puntos de vista. Fernando Bayona, sus fotografías son puras escenografías exquisitamente cuidadas con toques cinematográficos. A través de su obra es capaz de narrar historias, a veces conocidas, sin abandonar esa búsqueda de trascendencia capaz de engrandecer a sus personajes.

“Capitán Roy Hope” de Jose Luís Serzo.

Otro artista constructor de personajes es José Luís Serzo. Sus proyectos pasan de lo escultórico a lo pictórico donde el cuento y lo fantástico es el eje de toda su obra.

“Plato Marca Spanien” de Julio Fálagan.

Una de la virtudes de Julio Fálagan es el uso de humor como lenguaje para hacernos reflexionar sobre la historia y la actualidad. Su obra podría definirse como un mashup de objetos y discursos, cuyo resultado provoca la reflexión o risa del espectador. Este año se encuentra embarcado en un proyecto junto La Gran, donde crearán una línea de objetos propios de merchandising entremezclando la iconografía española y alemana.

Imagen de “Worker man” de Jonathan Notario.

Jonathan Notario es un auténtico maestro capaz de servirse de un lenguaje publicitario de ida y vuelta. El uso una doble lectura permanente en su obra que desde una aparente superficialidad nos sumerge en una crítica intensa a los problemas y situaciones de nuestra realidad. Se encuentra en plena evolución donde su personaje workerman adquirirá mayor desarrollo.

Imagen del Instagram de Mario Monforte. Autorretrato.

Además de la evolución de su obra, lo más destacable de Mario Monforte es su presencia en redes sociales con un marcado estilo propio. Su eficaz coqueteo con estos medios nos permite nos sólo conocerle como artista, sino también empaparnos de su intensa vida social, que forma parte también de su identidad artística. Se presenta como un auténtico creador de tendencia capaz de atraer masas tras él.

“Confinement In Search Of identity”: Nine Container. por Romuald&PJ.

Abel Azcona, no será fácil dejar de seguir su huella ya que el potencial de la labor comunicadora de su obra no tiene límites. No sólo por su empleo de las redes sociales y su labor como conferenciante, también porque la creación de Abel es capaz de atraparnos en la crudeza de su discurso creando imágenes estéticamente más amables que su relato interno.

¿Y vosotros?, ¿qué artistas pensáis que dejarán huella en 2014?